Y llegó la Navidad...

Ay! Ya está aquí la Navidad! Que bonito todo... las lucecitas de las calles, los niños ilusionados, los centros comerciales engalanados, las fiestas... Pero también... las cenas de empresa, las mierdas que nos regalan, buscar regalos para hacer, los putos villancicos, las cenas familiares... Y es que la Navidad es un arma de doble filo amigos.

¿Cómo sabréis que ya en Navidad? Primero, porque el Corte Inglés lo anuncia. Hasta que el Corte Inglés no dice que es Navidad aquí nadie está en fiestas. También sabréis que es Navidad porque vuestros correos/tuentis/facebooks y demás cosas se os llenarán de decenas, cientos, miles o incluso millones de correos felicitandoos la Navidad. El primero lo recibes con una sonrisa. Incluso llegas a responderle al que te envió. Pero cuando llevas 30, empiezas a decir: "Pufff!! estoy hasta los h... de Papá Noel!"

Yo odio a Papa Noel. Con ira incluso. Un gordo barbudo (que a saber desde cuando no se afeita) que según la Wikipedia nació en el año 280. Por lo que tiene 1729 años. ¿Me quieren hacer creer que un tío de esa edad, con esa barriga, con ese traje... es capaz de meterse por las chimeneas y repartir regalos por todo el mundo en una noche? Además, yo no tengo chimenea. ¿Por dónde coño entra en mi casa? No me fío de Papa Noel... un tío que se hace llamar Santa... es un travelo seguro!! Y encima regala cosas sin nada a cambio... bueno, sí, que le pongamos una copita y un poquito de turrón en la mesa. Teniendo que visitar 7 mil millones de casas, con sus respectivas copitas... así acaba la noche...

Papa Noel: "Ylo metlaboliso mluy blien el alclohol"

Ahora recibiremos muchos regalitos. Los niños juguetitos y los mayores ropita (interior en su mayoría). Y se oirán las típicas frases que se dicen cuando se recibe un regalo en Navidad: "Ayyy!! Con la falta que me hacíaaaa!!" (cuanto más alargues la última "a", menos te gustará el regalo), "Un jersey! que calentito..." (lo de calentito también es aplicable a calcetines y camisetas interiores), "Una colonia! que fresquita..." (derivada de la anterior), "Anda mira! un... un... ¿Esto qué coño es?" (muy frecuente), "Vaya mierda me han regalao!" (frase dicha cuando se van los familiares de casa).

Luego tenemos el árbol navideño. Un árbol de Navidad es la mejor forma de saber si estás en una casa pobre o rica. Si ves que el árbol está lleno de miles de figuritas todas diferentes unas de otras, es una casa pobre. Si tiene pocas bolas y bonitas es una casa rica. Es algo así como que los pobres ponen en su árbol todo lo que han podido juntar a lo largo del año.

Y ni hablar de las cenas navideñas. Cenas llenas de familiares. De cuñaos. De primos. De suegros... todos juntos. Teniendo que aguantar a esas titas que no puedes ni ver. Esas titas que se ríen de aquella manera. Todos tenemos una tita que se ríe gritando mucho: "WAAAAAAAAAAA JA JA JA". Esa tita que te tiraba del moflete cuando chico. Y que aún te sigue tirando. Esa tita que a pesar de que tú tengas 30 años, seguirá refiríendose a tí como: "El niño".

Pero hay algo bueno en la Navidad. Y es que el 22 de diciembre se sortea el "Gordo". No, que no se me asusten los fans de Falete. El Gordo es la Lotería de Navidad. A ver si hay suerte y este año por lo menos toca algo. Que los últimos años lo único que toca es los huevos ver a tanta gente feliz en las noticias saltando de alegría por el premio, y tú igual de pobre que siempre.

En fin... mucha suerte para el sorteo (si compras un décimo) y FELIZ NAVIDAD!! HO HO HOOOOO!! ^^